Desde mediados del siglo XIX existió la intención por parte de inversionistas mexicanos, estadounidenses y franceses de conectar al estado de Chihuahua con el Pacífico por intereses diversos que incluían la explotación de los recursos naturales de la Sierra Madre Occidental y una vía más rápida para la comercialización con Medio Oriente, así que a razón de ello se trabajó en diversos proyectos que años más tarde dieron vida a una de las grandes obras de ingeniería del siglo XX, el Ferrocarril Chihuahua al Pacífico, mejor conocido como Chepe.

El Chepe desde su concepción fue un proyecto ideado para facilitar el intercambio de mercancías provenientes de Asia y Estados Unidos, en donde Chihuahua serviría como puente, con la posibilidad de exportar al resto del mundo los recursos minerales y forestales de la sierra. Entre los empresarios chihuahuenses que promovieron la creación del Chepe destaca Enrique Creel y aunque el proyecto inició con un gran ímpetu a principios del siglo XX, se concretó hasta la década de 1960 gracias a la participación del estado, casi un siglo después de haberse proyectado.